miércoles, 23 de febrero de 2011

Sitio para estudiar

Todas las materias, en videos educativos. Ya ofrece más de 7.000 audiovisuales, seleccionados por profesores de una universidad mexicana. El Ministerio de Educación recomendó el sitio y los argentinos figuran entre los que más lo consultan

 Se llama Utubersidad –http://utubersidad.com–, y ofrece una práctica clasificación de videos académicos para todas las edades, aunque más orientado para el nivel medio y terciario. La fase beta del proyecto (de prueba) fue lanzada recientemente y la página ya tiene más de 7.000 videos.

El sitio nació en México y ya lo consultan en toda América y España. Docentes y estudiantes argentinos figuran segundos entre los que más visitas han hecho hasta el momento.

http://utubersidad.com

Servicio de Internet para recorrer el cuerpo humano

SE ACCEDE DESDE HTTP://BODYBROWSER.GOOGLELABS.COM/



Ideal para estudiantes que quieren saber más sobre su propio cuerpo, se presentó Google Body Browser, un explorador del cuerpo humano por dentro. Se trata de un servicio gratuito de Internet que muestra un cuerpo humano en tres dimensiones con todos los detalles.
Con las herramientas de navegación es posible ir cambiando “las capas” del cuerpo (pasando de la piel a los huesos, por ejemplo), y ver en cada una de ellas los órganos que la componen.
Durante la navegación se puede girar la figura y luego profundizar en la anatomía del ser humano hasta conseguir detalles, haciendo zoom, de un determinado hueso u órgano. También se pueden identificar músculos, articulaciones, y los sistemas circulatorio y nervioso.
Otra forma de recorrerlo es por palabra clave, colocando, por ejemplo, fémur, y el sistema llevará al estudiante al lugar del cuerpo virtual donde está este hueso.
Body Browser por ahora está sólo en inglés. Y para usarlo es indispensable contar en la PC con el motor gráfico WebGL, sólo presentes en el navegador Firefox 4 y en la última versión de Chrome (también de Google).

sábado, 12 de febrero de 2011

Pacientes con déficit de atención son más creativos

El trastorno puede ser adquirido durante la infancia y perpetuarse hasta la edad adulta.

Investigadores de la Universidad de Michigan y del Colegio Eckerd, publicaron un estudio en el que explican que los adultos jóvenes con trastornos de hiperactividad por déficit de atención, son más creativos que los que no lo sufren.

En dicho estudio se encontró también que los individuos con ADHD (por sus siglas en Inglés) conciben en mayor proporción diferentes estilos de pensamiento, es decir, generan ideas diversas y creativas pero al momento de terminar alguna encomienda no son eficientes.

Holly White, profesora asistente de psicología en Eckerd, y principal autora del estudio, replicó el estudio que realizó en el 2006 y concluyó que las personas con ADHD sobresalen en las pruebas estandarizadas de creatividad.

“Sabíamos que los individuos con ADHD se desempeñan mejor en las mediciones de laboratorio sobre el pensamiento divergente, pero no sabíamos si eso se reflejaría en logros en la vida real. El estudio actual sugiere que así ocurre”, comentó Priti Shah, coautora del estudio.

Generar varias soluciones posibles para solucionar un problema es pensamiento divergente.

Deficiencia de atención, hiperactividad e impulsividad son algunos de los síntomas que presentan los pacientes con ADHD, que puede ser adquirido durante la infancia y perpetuarse hasta la adultez.

El estudio se aplicó a sesenta estudiantes universitarios (la mitad de ellos con ADHD). Los individuos respondieron a un cuestionario sobre su nivel de logros en diez áreas relacionadas con la creatividad. Humor, artes culinarias, artes visuales, música, inventos y escritura fueron algunos de los temas presentados. Los inviduos con Attention deficit hiperactivity disorder obtuvieron mejores resultados que los que no sufren el trastorno.

Otro cuestionario evaluó el estilo creativo preferido de la persona: el que aclara, es decir que define y estructura el problema; el ‘ideador’ que gusta de generar ideas; el desarrollador, que elabora o refina ideas y soluciones; y los ejecutores, que incorporan una idea refinada en un producto o solución final.

Se aplicó un cuestionario adicional a los estudiantes, el cual evaluó el estilo creativo de la persona. Existen cuatro tipos: El que define y estructura el problema , el “ideador” que gusta de generar ideas, el desarrollador, quien crea ideas y ofrece soluciones y el ejecutor, que aplica la idea final a un producto o solución.

Los pacientes con ADHD eligieron el estilo “ideador”, mientras que los estudiantes que no sufren el trastorno optaron por el desarrollador.

Las investigadoras señalaron que, debido a que los examinados son estudiantes universitarios y cuentan con un perfil peculiar y exitoso, los resultados podrían variar. Priti Shah concluyó que los afectados por el trastorno ADHD podrían ser capaces de encontrar ventajas debido a su fortaleza creativa.

Detectan señales del trastorno de déficit de atención desde la cuna

Tiene componentes genéticos y ambientales, pero bien diagnosticado puede controlarse. Estudiaron a chicos hasta los 7 años.

Sábado 12 de febrero de 2011 | La Nación

Nora Bär
Casi todos los sufridos familiares de chicos muy inquietos alguna vez lo temieron. Pero aunque la popularización del término haya colaborado en que padres y maestros se confundan, no cualquier chico movedizo tiene síndrome de trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
"Es importante saber que no todos los pequeños que tienen problemas en la escuela lo padecen -aclara la doctora Andrea Berger, investigadora nacida en Buenos Aires, pero residente en Israel-. Este cuadro está definido por problemas específicamente en el control de la atención; es decir que son chicos que se orientan demasiado a cosas que podríamos calificar como irrelevantes. Algunos tienen solamente trastornos de atención, y otros, también hiperactividad. Lo más común es el síndrome combinado, con variaciones individuales, ya que no hay dos chicos iguales."
Después de emigrar con su familia a Israel en 1977, Berger decidió hacer la licenciatura en psicología y en ciencias de la computación, y luego se doctoró en la Universidad Ben-Gurion del Negev, donde investiga actualmente. Desde hace casi una década tiene trabajos científicos en colaboración con el padre de los estudios de la atención, Michael Posner.
Por estos días, Berger está de visita en el país, entre otras cosas, para dar una charla en la Universidad de San Martín (informes en www.unsam.edu.ar ) sobre un estudio realizado con cuatro colegas (todas mujeres) de su universidad y de la maternidad del Hospital Universitario de Beer Sheva, el primero que analizó longitudinalmente, desde el nacimiento hasta los siete años, los múltiples aspectos que originan, se asocian, identifican y permiten pronosticar el TDAH en los niños.
"Enrolamos a alrededor de 200 familias y llegaron al final más de cien -cuenta-. Los estudiamos desde bebes, cuando tenían dos años, tres, cinco... hasta los siete. Analizamos el desarrollo desde distintos enfoques: genéticos, educativos, cognitivos, familiares, buscando las marcas más tempranas del trastorno y también los factores predisponentes para hacer predicciones. Tenemos más información de la que uno puede analizar en su vida, pero salieron cosas muy interesantes."
Uno de los datos más importantes, según Berger, es que las variables principales que midieron en los chicos cuando eran muy pequeños son predictivas.
"Se sabe que el TDAH tiene un componente hereditario, pero la pregunta es qué -explica-. Un chico varón de un papá que tiene trastorno de la atención presenta alrededor de un 60% de posibilidades de expresarlo. Pero la transmisión familiar no es toda genética, en parte también ocurre a través de la crianza."
Dentro del ambiente, descubrieron las científicas, una de las cosas que predisponen al TDAH es el caos, la desorganización, falta de predictibilidad. Pero el análisis no es tan sencillo, porque todos los factores en juego afectan de forma interactiva. "Por supuesto que a un chico que no tiene ninguna predisposición genética, tener una familia desorganizada no le causará problemas de atención -subraya la investigadora-. Pero si se combinan los factores genéticos, los conductuales, una forma de crianza más negativa, las posibilidades aumentan."
Otro hallazgo significativo fue que en los bebes del grupo de riesgo ya se podían advertir diferencias. "En el nivel neurológico, ya había diferencias en la madurez de la autorregulación -detalla Berger-. Por ejemplo, al llorar, tardaban más en tranquilizarse, costaba más calmarlos. Sometiéndolos a una prueba en que los frustrábamos (les dábamos un juguete y después lo poníamos detrás de una pantalla transparente, por ejemplo), a los dos o tres años, la ira de los chicos en riesgo era menos eficiente. Amaban un berrinche. También, detectamos que dormían en forma más irregular."
En una de las pruebas que realizó su equipo, la doctora Berger midió la actividad cerebral de los chicos cuando estaban haciendo una tarea cognitiva en la que ponían en juego mecanismos de inhibición (se les daba la indicación de no hacer algo). "Aunque los resultados son preliminares, sugieren que estos chicos no consiguen reclutar las zonas cerebrales necesarias para esa clase de función, tienen hipoactividad de esas áreas neuronales", explica.
Estas y otras conclusiones ayudarán a ajustar el diagnóstico y tratamiento del TDAH. La buena noticia es que ya hay un número de estudios que indican que, en ese caso, si la medicación está bien indicada, tiene un fuerte impacto positivo. "Muchos chicos la toman durante la niñez y luego van aprendiendo a hacer compensaciones -dice Berger-. Es exactamente como si necesitaran anteojos. Estos trabajos sirven para desmitificar las preocupaciones familiares. Una consulta temprana puede ahorrar muchos dolores de cabeza al chico y a la familia."

Actividades didácticas (de 3 a 5 años)

* Motricidad
* Pre-Escritura
* Matemáticas

Espero que les sea de mucha utilidad!!!



miércoles, 9 de febrero de 2011

Las vias neuronales del aprendizaje

Lic. Nse. Adriana Marcovich
Neuroplasticidad cerebral. "Las vías neurales del aprendizaje" -
Directora de Szych-Marcovich & Asociados





Comenzar el aprendizaje de la lectura

Mejorar expresión escrita

Recurso diseñado para que los alumnos desarrollen la expresión escrita, tanto en inglés como en español, mediante el uso de un software para la elaboración, modificación y elaboración de cómics, un medio particularmente atractivo.

http://ntic.educacion.es/w3//eos/MaterialesEducativos/mem2009/playcomic/index.html 

sábado, 5 de febrero de 2011

viernes, 4 de febrero de 2011

Miedos infantiles: cómo ayudar a los chicos

Lic. Rosina Duarte
Los miedos infantiles son las emociones que expresan los niños cuando sienten que enfrentan una situación peligrosa ya sea real o imaginaria. Dependiendo de la edad de los niños, pueden manifestar temor a aquello que les resulta desconocido o extraño, sin importar si conlleva o no un peligro real.
 

Cada etapa de la vida puede verse invadida por algunos miedos, los más comunes que se presentan durante la infancia son: miedo a estar solos, temor a la oscuridad, miedo a las personas extrañas, a ruidos fuertes, a la muerte, a ciertos animales, a la lluvia y en la mayoría de los casos también a las tormentas, a fantasmas, monstruos, brujas, etc. Ya sean estímulos reales o imaginarios, los niños pueden ser afectados por estos sentimientos debido a que están cargados de cierta intensidad produciendo una sensación de temor.

La mayoría de los miedos van evolucionando de manera gradual durante el transcurso de la vida, lo cual es saludable para la vida de cada niño debido a que ofrecen la oportunidad de brindar las herramientas necesarias para enfrentar diferentes situaciones de la cotidianeidad.

Por otra parte, existen algunos miedos que pueden transformarse en patológicos y es lo se denomina "fobias", cuando tienen una carga excesiva emocional e imposibilitar el normal desarrollo de la vida diaria del niño, ya que constituyen una fuente de sufrimiento constante. En estos casos, si estos miedos aumentan en intensidad y se prolongan en el tiempo, es necesario consultar con un especialista.

Algunos miedos típicos:

Miedo a la oscuridad: Es una emoción completamente normal cuando los niños son pequeños. Esto se debe a que tienen un mundo imaginario y fantaseado muy grande: temen que los monstruos, fantasmas, extraterrestres, brujas, duendes, o cualquier figura imaginaria que ellos crean puedan aparecerse cuando la luz se apaga. En algunos casos también un cambio intenso en sus vidas como una mudanza o la separación de sus padres, puede llevar a que aparezca este temor.

Es necesario que sepamos también que este miedo está relacionado con lo que implica el desapego de los padres a la hora de dormir, es un aprendizaje el poder dormir solos, entonces tenemos que acompañar y ayudar a nuestros hijos a que este temor ceda.

Lluvias y tormentas: cuando son más pequeños los niños temen las lluvias o tormentas debido al ruido que hacen y al desconocimiento de por qué se producen. Es necesario que los padres estén cerca, los abracen, les hablen y expliquen que no hay por qué temer. Esto también suele suceder cuando suena un timbre.

Miedo a los perros: alrededor de los 2-3 años suele aparecer este temor. Es muy positivo que el niño vea que los padres no le temen a los perros y que los acarician y hablan sin temor alguno.

Miedo a la soledad: este temor aparece tempranamente y tiene que ver con el proceso que implica la separación física con los padres. Para que este temor evolucione de manera gradual es necesario que el niño tenga internalizada las figuras parentales que le otorgan seguridad y tranquilidad para consigo mismo y el entorno.

Miedo a caerse: cuando son pequeños, y recién comienzan a aprender a caminar aparece en los niños este temor a caerse. Lo importante es que los padres le den la mano, estén cerca y los alienten a intentar caminar sin temor a la caída.


Sugerencias para los padres:

Comunicación: esta es la herramienta principal para erradicar los miedos. Es necesario que los padres logren una buena comunicación al respecto y dejar que el niño exprese libremente sus temores o miedos.

Contención: los padres deben ser los contenedores y sostenedores de los niños en estas situaciones de miedos. El sostén que les brinda seguridad y confianza en sí mismos para disminuir estos temores son los padres. Por ejemplo, si los niños tienen miedos de algunos animales, los padres pueden acompañarlos –de la mano, si fuera necesario- a ver esos animales y mostrarles que no hay motivo para temerles. La presencia de los padres otorga coraje al niño y seguridad en ese contexto temeroso.

Acompañamiento: es muy beneficioso que los niños se sientan acompañados por sus padres cuando sienten miedos o temores, que sientan que no están solos y que pueden compartir sus sentimientos con los adultos responsables de ellos. Sería bueno poder compartir con los niños los temores que los adultos tenían durante su infancia y el modo en que lo fue superando, así el niño evitará la vergüenza y podrá saber que sus miedos se superan tal como les sucedió a sus padres.

Juego: otra herramienta muy eficaz es utilizar el juego para ir hablando acerca de sus temores, y representarlos a través de lo lúdico. Por ejemplo si un niño tiene temor a la oscuridad, se puede jugar durante el día a que es de noche y mostrarle al niño que nada malo sucede en la oscuridad.

Es importante recordar que la presencia de los padres es lo que a los niños les transmite confianza y seguridad en las distintas situaciones que viven. Las funciones paternales justamente deben desarrollarse en pos de otorgar al niño tranquilidad, confianza y seguridad tanto para sí mismo como para su entorno, utilizando algunas herramientas como la comunicación, la contención, el cariño y el juego. La paciencia de los padres es la mejor herramienta para utilizar en este período de miedos infantiles.

Lic. Rosina Duarte. Psicóloga Infanto-Juvenil, Coordinadora del Primer Programa Argentino de Formación en Primera Infancia y Crianza

Juegos para estimular la inteligencia

Mientras se divierten, los chicos potencian sus habilidades. Para acompañarlos en el proceso, dos especialistas nos dicen cómo y por qué jugar en grupo.

“Para tener un desarrollo sano, es importante que los chicos cuenten con momentos de juego. Los ayudan a desarrollar su personalidad a través de la exploración de roles, preferencias e intereses”, explica la licenciada en psicología Julieta Tojeiro, de Hémera.
“El juego estimula la socialización de los chicos. También les ayuda a formar habilidades para la resolución de problemas, a implementar diferentes estrategias y a tomar decisiones”, agrega la especialista.
Algunos ejemplos de juegos, según la licenciada Rosina Duarte, coordinadora del Programa Argentino de Formación en Primera Infancia y Crianza, son los siguientes:
DE 2 Ó 3 AÑOS
En grupo, dibujar un cuerpo humano en una cartulina y las partes del cuerpo (manos, brazos, ojos, etc.) por separado en cartulinas más pequeñas. Cada jugador tiene que colocar y nombrar las partes del cuerpo en el lugar que correspondan y, luego, decir para qué sirven, por ejemplo, los brazos sirven para abrazar.
Los niños también pueden ayudar a crear las distintas piezas pintándolas o usando materiales como plastilina o papel glacé. Este juego ayuda a descubrir las partes del cuerpo, a aprender a nombrarlas y a reconocer las propias.
También son muy útiles los juegos de construcción, como los de apilar bloques y crear formas con distintas piezas. Ayudan a desarrollar las habilidades que se van adquiriendo en esta etapa.
DE 4 Ó 5 AÑOS
Hay que ayudarlos a estimular la inteligencia mediante el lenguaje. Son ideales los juegos con rimas, palabras y cuentos inventados.
Un juego consiste en que todos los participantes se sienten en círculo. Cada uno escribe dos palabras en dos hojas de papel y las colocan en una bolsa ubicada en el medio. El primer participante saca un papel, lo lee en voz alta y dice una palabra que rime con esa palabra. Todos los participantes (uno por uno hasta dar vuelta la ronda) tienen que decir alguna palabra que rime. Luego, se saca otra palabra y se comienza a buscar rimas, así hasta terminar lo que hay en la bolsa. Otra versión del juego es escribir una frase en cada papel e inventar una historia a partir de las ocurrencias que les dispara esa frase.
Estos juegos logran estimular de manera divertida la inteligencia de los niños, además de tener bajos costos y ser muy sencillos.

http://www.entremujeres.com/hogar-y-familia/hijos/juego-familia-grupal-grupo-ninos-inteligencia-estimular-desarrollo-psicologia-vacaciones_de_invierno_0_305369467.html

jueves, 3 de febrero de 2011

Chicos: cómo ayudarlos a tener amigos

Una de las funciones de los padres o cuidadores es guiar y acompañar a los niños para que aprendan a relacionarse con sus pares y con el entorno. Aquí, algunos consejos. 
Lic. Rosina Duarte
La amistad es uno de los pilares fundamentales de la vida de los seres humanos. Ayuda a tener un desarrollo psicosocial saludable, ya que somos seres sociales por naturaleza y con necesidades de relación.
Por eso, es muy importante brindarle a los niños las herramientas necesarias para lograr establecer lazos afectivos duraderos y genuinos.
Los niños tienden a imitar los modos de accionar de los padres o cuidadores primarios. Son sus referentes para todo, son quienes ellos desean ser y sus ideales de personas. Entonces, la función de los adultos es transmitirles la importancia de las relaciones amistosas, como base del buen desarrollo emocional de las personas.
Hay que tener en cuenta que dependiendo de la edad de los niños y las distintas etapas evolutivas de su crecimiento, cada uno irá adquiriendo distintas herramientas cognitivas y emocionales, propias de ese período, para relacionarse con otros y armar vínculos afectivos.
Es necesario que el entorno de los niños les brinde seguridad, confianza y fortalezca su autoestima y autoconcepto para que ellos puedan establecer vínculos saludables con los otros. Las funciones parentales tienen que basarse en brindar lo mejor de sí para lograr que el ámbito de los niños sea confortable, tranquilo y seguro.
Es importante:
*  Acompañarlos. Estar con ellos en el recorrido de nuevas experiencias y satisfacer sus necesidades básicas y naturales.
*  Sostenerlos. La función de sostén es fundamental, ya que transmite seguridad y confianza en los niños, para que puedan relacionarse con el entorno de manera saludable.
*  Guiarlos. Especialmente durante la primera infancia, hay que mostrarles el camino adecuado para establecer y fortalecer los vínculos.
*  Alentarlos. Para que puedan generar nuevas relaciones y establecer nuevos grupos de pertenencia.
*  Estimularlos. Darles aliento para que se animen a realizar actividades y a desarrollar intereses propios.
La manera de relacionarse que tienen los niños se aprende en la casa, en la escuela y en la familia en general. Entonces, un buen ejemplo para ellos es la constante presencia de los cuidadores primarios para acompañarlos en este recorrido de vida. Tener en cuenta que, especialmente en la primera infancia, los niños necesitan absolutamente de otro responsable que lo sostenga, lo guíe y descifre lo que cree beneficioso para ellos.
Todo esto enmarcado en la naturaleza e instintos de los adultos, ya que no existe “el” manual que puede enseñar cómo realizar esta tarea. Sin embargo, si uno actúa desde sus creencias y pensando en beneficiar a los chicos, el resultado es maravilloso y sorprendente.
Por la licenciada Rosina Duarte, Coordinadora del Primer Programa Argentino de Formación en Primera Infancia y Crianza. www.fundacionbsas.org.ar

Edad avanzada y anomalías fetales: mitos y verdades

A medida que avanza la edad de los mujeres y los varones, el riesgo de concebir un hijo con alguna anormalidad congénita aumenta. En las mujeres, ocurre a partir de los 35, y con más fuerza desde los 40. En los varones, el declive arranca en los 40. Cómo prevenir los efectos del paso del tiempo.
Dra. Andrea Marazzi
En la actualidad las mujeres esperan más tiempo para comenzar a buscar su primer hijo, dado que muchas aguardan a desarrollarse en su profesión, la llegada de la persona adecuada se dificulta, las personas se casan a mayor edad.

También debemos considerar que muchas mujeres no tienen en cuenta que luego de los 35 años la capacidad fértil femenina disminuye y también los riegos aumentan. Podemos decir que entre los 25 y los 35 años la mujer se encuentra en su "mejor edad reproductiva", pero lamentablemente muchas veces las condiciones no están dadas en ese momento para buscar la concepción.

Esto no significa que la mujer de 39 o 40 años que se embaraza va a tener sí o sí un embarazo con problemas. De hecho, la mayoría de los niños de madres añosas nacen sanos (algo que es importante subrayar, porque con la posibilidad de vitrificar óvulos se avivan muchos fantasmas injustificados). Pero sí debemos considerar que luego de los 35 años y más aún, luego de los 40, las probabilidades de embarazarse bajan y los riesgos aumentan.

Los riesgos que aumentan son los de abortar en el primer trimestre, por aneuploidias (alteraciones genéticas ) de los embriones que suelen ser incompatibles con la vida; la aparición de alteraciones cromosómicas como Síndrome de Down ( trisomía 21), Síndrome de Patau (trisomía 13), Síndrome de Edwards (trisomia 18),síndrome de Turner (monosomía X), etc.

Para aclarar aún más aquí hay un pequeño cuadro:

Riesgo de anormalidades cromosómicas en recién nacidos por edad materna

Edad materna        Riesgo de síndrome de Down     Riesgo total de anormalidades
                                                                                             cromosómicas

20                                           1/1,667                                           1/526
25                                           1/1,250                                           1/476
30                                           1/952                                              1/385
35                                           1/378                                              1/192
40                                           1/106                                              1/66
41                                           1/82                                                1/53
42                                           1/63                                                1/42
43                                           1/49                                                1/33
44                                           1/38                                                1/26
45                                           1/30                                                1/21
46                                           1/23                                                1/16
47                                           1/18                                                1/13
48                                           1/14                                                1/10
49                                           1/11                                                1/8


Fuente: Maternal Fetal Medicine: Practice and Principles. Creasy and Resnick, eds. W.B. Saunders, Philadelphia, PA. 1994:71
La edad masculina también afecta la fertilidad, pero mientras que la fertilidad femenina comienza a disminuir alrededor de los 30 años (y más luego de los 35), la fertilidad masculina desciende luego de los 40 años (los hombres también tienen su reloj biológico). Esto puede deberse a la mayor exposición a tóxicos medioambientales, tabaco, alcohol, infecciones, alteraciones hormonales.
A medida que envejece, la presencia de mayor fragmentación del ADN espermático aparece, provocando menor capacidad fértil. Y también aumentando la tasa de aborto por causa masculina.
¿Cómo prevenir el efecto del paso del tiempo? Tanto en hombres como en mujeres, el cambio de hábitos como dejar de fumar, reducir la ingesta de alcohol, de grasas saturadas; aumentar la actividad física regular, consumir una dieta saludable, rica en frutas, verduras, pescado, cereales integrales y frutos secos, y por sobre todo, consultar al especialista rápidamente ante cualquier duda.

Dra. Andrea Marazzi. Tocoginecóloga, especialista en Medicina Reproductiva. Estudios Superiores en Bioética y en Psicoinmunoneuroendocrinología de la Reproducción

Edad materna y riesgo de Síndrome de Down

La posibilidad de criopreservar óvulos y el manejo poco escrupuloso de algunos centros respecto a la "conveniencia" de congelar sus gametas en mujeres jóvenes generan angustias y malentendidos en muchas mujeres. El boom de la genética y el acceso a algunas tecnologías hacen pensar que debemos hacer sí o sí algunos controles o tomar decisiones difíciles para "descartar" problemas. Pedimos a un especialista que nos explique cuál es la realidad de la relación entre edad materna y síndrome de Down. Te invitamos a pensar por nosotras mismas. 
Dr. Fernando Neuspiller
 
La mayoría de las veces la ocurrencia del Síndrome de Down es debido a eventos aleatorios que ocurren durante la formación de las gametas: óvulo y espermatozoide. Es bien conocido que este síndrome no se debe a ningún comportamiento parental o a factores medioambientales.
Los defectos de este cromosoma han dado origen a múltiples estudios. Gracias a ellos hemos aprendido que en el 88% de los casos el cromosoma extra es aportado por la madre, en 8% de los casos por el padre y, en el 2% restante, el error es producido por defectos en la división celular durante la fecundación de las gametas.
Muchos investigadores han establecido que la probabilidad de que una gameta (célula reproductora) contenga una copia extra del cromosoma 21 se incrementa con la edad materna. Por lo tanto, una mujer más grande tiene más riesgo de tener un embarazo con Síndrome de Down (comparado con una mujer más joven). A su vez, sus posiblidades de embarazo y de que el mismo llegue a término se reducen también con la edad.
Esto determina que, del total de los recién nacidos de una población, más del 80% son dados a luz por madres menores a 38 años, lo cual explica por qué cerca del 75% de los bebes con Síndrome de Down son dados a luz por mujeres jóvenes. Los datos arrojan que sólo el 9% de los nacidos con este síndrome son fruto de mujeres mayores de 35 años, pero alrededor del 25% de los bebes con Síndrome de Down nacen en este grupo de edad.
Es claro: la incidencia del síndrome de Down crece con la edad materna. Muchos especialistas recomiendan que las mujeres que se embarazan a partir de los 38 años se realicen el estudio prenatal. La probablidad de Síndrome de Down a los 30 años es de 1 en 1.000, pero a los 35 años es de 1 en 400, y esta incidencia continúa aumentando: a los 42 años es de 1 en 60 y a los 49 años, de 1 en 12.
Los antecedentes también operan. Para padres con un hijo con Síndrome de Down por translocación del cromosoma 21 hay un riesgo incrementado de su ocurrencia. Esto se debe a que uno de los dos progenitores puede ser portador de una translocación balanceada. La translocación ocurre cuando un pedazo del cromosoma 21 se pega a otro cromosoma, más frecuentemente el cromosoma 14, y ocurre durante la división celular.
También es importante aclarar que no todos los padres de niños con Síndrome de Down tienen una translocación balanceada. En algunas situaciones no hay riesgo incrementado de futuros embarazos con síndrome de Down.

Edad materna                   Incidencia de Sindrome de Down
Menor a 30                         Menos de 1 en 1.000
30                                     1 en 900
35                                     1 en 400
36                                     1 en 300
37                                     1 en 230
38                                     1 en 180
39                                     1 en 135
40                                     1 en 105
42                                     1 en 60
44                                     1 en 35
46                                     1 en 20
48                                     1 en 16

* Por: Dr. Fernando Neuspiller, especialista en fertilidad del IVI Buenos Aires.